miércoles, 14 de septiembre de 2011

Difamación por Internet utilizando las redes sociales es un delito informativo investigado por el DICAT

Por Miguel Alonso.

En el Palacio de la Policía Nacional, ubicado en la Calle Leopoldo Navarro esquina México, existe el Departamento de Investigación de Crímenes y Delitos de Alta Tecnología (DICAT). Ubicado en la parte trasera de ese edificio.

Este departamento posee un personal calificado y con estándares profesionales de alta calidad y denotada experiencia al mando del Coronel LICURGO YUNES.

Con tan solo un correo, una dirección electrónica o un dialogo de una conversación cibernética, pueden iniciar el procedimiento de localizar la dirección IP del emisor de la nota (IP, que en términos llanos es una posición numérica que identifica, de manera lógica y jerárquica un MODEM conectado a una computadora por medio de un circuito de comunicación suministrado por la compañía telefónica a su cliente y este puede estar o no dentro de una red), con esta información puede el DICAT, obtener la dirección de la ubicación de la persona que emite los mensajes o correos.

Y es que la República Dominicana nada tiene que envidiarle a las prestigiosas agencias de investigación espaciadas por todo el mundo. Este departamento, adscrito a la Dirección de Investigaciones Criminales (DICRIM) de la Policía Nacional, se encarga de perseguir los delitos informáticos, algunos de ellos de difícil pronunciación para la mayoría de las personas, utilizando los equipos tecnológicos más modernos conocidos hasta el momento.

Difamación por Internet utilizando las redes sociales, Clonación de tarjetas de crédito, Sustracción de teléfonos, Phising, Hacking, Piratería, Pedofilia, etc., son algunos de los más de 25 delitos informáticos investigados por el DICAT, a simple requerimiento de un particular o una empresa afectada.

Una de las razones por la cual pueden ofrecer y garantizar un servicio técnico y de investigación de primera calidad, es que este departamento cuenta con un personal técnico entrenado en el FBI (Federal Bureau Investigation) de los Estados Unidos y otras agencias internacionales, para el manejo y uso de evidencias electrónicas, obtenidas al marco de nuestra legislación especial, como lo es la ley 53-07 sobre Crímenes y Delitos de Alta Tecnología.

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